Aunque en Internet se comparan la técnica Tummo y el Método Wim Hof, este último es una versión simplificada y científica centrada en la resistencia al frío y la salud, mientras que el Tummo es una práctica espiritual budista más compleja que incluye visualizaciones religiosas y forma parte de los "Seis Yogas de Naropa".
Nota: Se recomienda aprender estas técnicas bajo la guía de un instructor cualificado, ya que la hiperventilación y las retenciones prolongadas pueden causar mareos o efectos adversos si no se realizan correctamente.
El Tummo (o tummó) es una técnica ancestral de yoga y meditación del budismo tántrico tibetano, conocida como la práctica del "fuego interior". Su objetivo principal es generar calor corporal a través de la voluntad para alcanzar estados profundos de conciencia y bienestar físico.
En qué consiste la técnica de meditación Tummo
Esta práctica combina tres elementos clave:
Respiración controlada: Se utiliza una técnica llamada "respiración del jarrón" (kumbhaka), que implica inhalaciones profundas hacia el abdomen y retenciones prolongadas del aire.
Visualización: El practicante visualiza una llama o esfera de fuego en el área del ombligo o la base de la columna, la cual se expande por todo el cuerpo con cada respiración.
Contracción muscular: Se aplican cierres físicos o contracciones (como el suelo pélvico) para concentrar y dirigir la energía interna.
Beneficios principales de practicar Tummo
Termorregulación: Permite elevar la temperatura corporal significativamente, incluso en condiciones de frío extremo.
Reducción del estrés: Activa el sistema nervioso para mejorar la respuesta ante la ansiedad y fortalecer la resiliencia emocional.
Salud física: Mejora el metabolismo, la circulación sanguínea y fortalece el sistema inmunológico.
Claridad mental: Fomenta una concentración intensa y puede llevar a experiencias de gozo o "bienaventuranza" espiritual.
No hay comentarios:
Publicar un comentario
Nota: solo los miembros de este blog pueden publicar comentarios.